En JUNO comprendemos la importancia de proteger y embellecer las superficies exteriores con productos de alta calidad, más todavía cuando se trata de edificios históricos.

En este caso de éxito, presentamos la renovación de la fachada del “Banco Herrero”, en Pravia, una edificio del año 1930 cuya memoria constructiva decía que: “en todo se seguirán las buenas prácticas de la construcción procurando obtener un edificio digno del progreso y engrandecimiento cada vez mayor de la hermosa villa de Pravia.

Tomando como inspiración esa frase, para esta rehabilitación se han usado materiales de calidad como nuestros productos estrella Hidrocril, Primerlite y Novokril Satinado. Gracias a esta combinación, se logró un resultado estético impecable y una protección superior frente a las condiciones climáticas adversas.

Una fachada que necesitaba una renovación

La fachada del “Banco Herrero” en Pravia había sido pintada en muchas ocasiones, y aunque no presentaba grandes daños, la pintura mostraba los signos del paso del tiempo. Con una exposición constante al exigente tiempo de Asturias, era necesario renovar la superficie para asegurar su protección y mejorar su apariencia. El desafío principal era garantizar una excelente adherencia en las zonas reparadas y ofrecer un acabado resistente que perdurara en el tiempo.

Para este proyecto, se optó por aplicar una mano de Hidrocril, un fijador acrílico al agua de gran penetración y adherencia, ideal para igualar la absorción de la superficie. En las zonas donde fue necesario realizar reparaciones se utilizó Plaste JUNO, la pasta para reparar y alisar interiores lista para el uso.

También se utilizó Primerlite con el objetivo de asegurar una imprimación de calidad y máxima adherencia. Finalmente, se aplicaron dos manos de Novokril Satinado, una pintura al agua impermeable premium 100% acrílica para condiciones extremas y con conservantes antimoho, perfecta para resistir las condiciones climáticas más extremas.

La preparación de la superficie, clave para el resultado final

Para asegurar el éxito del proyecto, la correcta preparación de la superficie fue esencial. Dado que la fachada había sido pintada anteriormente y el estado general era bueno, no fue necesario retirar completamente el recubrimiento. Se realizaron los siguientes pasos:

  1. Lavado y lijado suave para eliminar partículas sueltas y mejorar la adherencia.
  2. Reparación de pequeñas zonas con la pasta Plaste JUNO y aplicación de la imprimación al disolvente con pliolite Primerlite en las áreas afectadas.
  3. Aplicación de una mano del fijador acrílico Hidrocril como imprimación para uniformar la absorción de la superficie.
  4. Con la superficie debidamente preparada, se aplicaron dos capas de pintura Novokril Satinado.

Gracias a su brochabilidad y su alta cobertura, el equipo pudo lograr un acabado uniforme sin complicaciones, proporcionando una protección impermeable y un acabado estético satinado.

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Un proyecto que recupera el esplendor original

El resultado fue una fachada completamente renovada manteniendo la esencia del origen histórico del edificio, con un acabado satinado que no solo mejoró el aspecto del edificio sino que también aseguró una protección duradera frente a las condiciones climáticas de Asturias. La combinación de productos de Pinturas JUNO fue clave para garantizar tanto la estética como la funcionalidad, demostrando una vez más la eficacia de nuestras soluciones para proyectos exteriores.

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