Aplicación con brocha o pistola.
HIERRO Y ACERO: Las superficies de acero han de estar totalmente limpias.
Para conseguir una buena protección, se recomienda chorreo abrasivo hasta grado Sa 2 ½ según norma ISO 8501-1.
ALUMINIO Y GALVANIZADO: Eliminar la herrumbe propia del galvanizado mediante el lavado con detergentes, agua dulce y fibras sintéticas abrasivas. Si fuera necesario lijar para matizar la superficie.
Remover bien el envase hasta su perfecta homogeneización.
Para más información consultar ficha técnica.